Bolivia prevé diseñar un segundo satélite a partir de noviembre

Los 62 bolivianos enviados a China para especializarse en el manejo del satélite de telecomunicaciones Túpac Katari se encargarán de efectuar el estudio y diseño para la instalación de un segundo satélite, pero de observación de la Tierra. No se descarta apelar nuevamente a la tecnología china.

El ministro de Obras Públicas Servicios y Vivienda, Vladimir Sánchez y el director de la Agencia Boliviana Espacial (ABE), Iván Zambrana, coincidieron por separado, que quienes se encargarán de este nuevo proyecto serán los profesionales bolivianos que viajaron a China a finales de octubre de 2012. Ellos retornarán a fines de octubre próximo, con nuevos conocimientos sobre tecnología espacial y diseño satelital. Por tanto, se prevé que comiencen a diseñar el nuevo satélite a partir de noviembre.

Bolivia prevé diseñar un segundo satélite a partir de noviembre

Según el ministro Sánchez, el satélite Túpac Katari permitirá al país dar un salto tecnológico, no solamente porque se ingresará a la época satelital y está previsto en los convenios con China que Bolivia desarrollará capacidades para producir su propio satélite.

“Los primeros becados se están especializando en China en diseños de satélites. Con el lanzamiento del satélite y la puesta en marcha vamos a entrar en un proceso de la industria satelital, vamos a comenzar a trabajar y a producir nuestros satélites”, anunció el titular de Obras Públicas.

Sobre si será China la que encare este segundo proyecto, Zambrana respondió que existen “interesantes” posibilidades.

Bolivia tiene una muy buena relación con China y estos lazos se van a consolidar a medida que avance el proyecto Túpac Katari. Aclaró que el Gobierno no está cerrado a considerar otras posibilidades.

Según Zambrana, el estudio se ha iniciado, pues ya se hizo el primer anteproyecto.

“Esperamos que el diseño final del satélite de observación lo haga la gente que se está especializando en China en diseño de satélites. Vamos a esperar que vuelvan a fines de octubre, a partir de ahí se trabajará con más intensidad en el diseño del segundo satélite”, detalló. Zambrana explicó que el satélite de observación de la Tierra es más ligero y pequeño que el de comunicaciones que lleva el nombre del héroe indígena de la colonia, Túpac Katari, por lo que su costo sería menos que el de comunicaciones.

Calculó que el satélite de prospección de la Tierra tendría un costo aproximado de 150 millones de dólares. El de telecomunicaciones Túpac Katari tendrá un costo de 300 millones de dólares.

PARA EL 2016 Según Zambrana, el segundo satélite es de largo plazo, pero está decidido a encarar este proyecto por decisión del Gobierno.

Consultado sobre cuánto tiempo duraría el proyecto, respondió que una vez concluido el diseño del nuevo satélite, la contratación de los servicios y la fabricación de éste, se prevé su lanzamiento en 2016.

“Una vez terminado el proceso de diseño y construcción del satélite podríamos lanzar el segundo en 2016, pero es una estimación que seguramente se efectivizará con el trabajo de los profesionales capacitados que retornarán de China”, agregó.

Según el director de la Agencia Espacial, el satélite de prospección permitirá analizar el contenido de la superficie y del subsuelo terrestre del país, para ayudar en la búsqueda de riquezas mineralógicas, como petróleo y gas natural, entre otros.

Es un satélite que estará en una órbita más baja que la del Túpac Katari (del tipo geoestacionario y a 36 mil kilómetros).

El segundo satélite es denominado de observación de la Tierra o de observación remota. Sirve para medir la composición del suelo y del subsuelo, lo que permitirá hacer un inventario de los recursos naturales y vigilar el crecimiento de las ciudades, la salud, de los cultivos. Tendrá muchas aplicaciones.

De acuerdo a las especificaciones de la Agencia Boliviana Espacial, este satélite de observación es más pequeño que el Túpac Katari, de menor peso, es más económico y tiene un tiempo de vida más corto, de no más de cinco años. en cambio el satélite Túpac Katari tendrá una vida útil de 15 años.

Zambrana explicó que este tipo de satélites de observación remota giran mucho más rápido, de modo que se ponen y salen en el horizonte. No están quietos en el cielo como estará el TKSAT-1, no están disponibles las 24 horas del día, pero se programa la misión de todo el día cuando están visibles.

Se le manda las instrucciones y el satélite las ejecuta durante la órbita hasta que vuelve a estar visible y luego se descargan los datos.

Para adelante en el diseño de satélites, el Gobierno cifra sus esperanzas en los 64 profesionales becados en la República Popular de la China donde reciben conocimientos tecnológicos que les permitirá operar el futuro satélite de comunicaciones Túpac Katari a ser lanzado a fines de 2013 y planificar otros.


Opinión 

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